¿CÓMO MOTIVAR AL TALENTO HUMANO?

A pesar de lo que se piensa, el dinero no es lo que más motiva a las personas, pues en ocasiones creemos que un incremento salarial es la única solución para estimular al equipo de trabajo en el logro de los resultados.

Existen otras maneras de reconocer el buen trabajo trayendo consigo beneficios a largo plazo y obteniendo un mayor compromiso del personal.

Por esta razón, me quiero referir a tres principios importantes para que revise en su organización, esperando encuentre oportunidades de mejora y motivación en el talento humano.

 

  1. Remuneración.

Imagen 1: Jerarquía de necesidades humanas

 (Abraham Maslow)

Imagen 2: Chip Conley – Peak

 

La pirámide de Abraham Maslow (Imagen 1) nos enseña como el primer nivel, las necesidades fisiológicas, permite hacer una semejanza con relación a la remuneración, (Imagen 2) Chip Conley – Peak, pues este tipo de motivación logra satisfacer aquellas necesidades básicas siendo el factor económico en tema principal. Sin embargo el factor salarial no es lo que realmente motiva a los colaboradores y es por esto que es bueno, en la retribución salarial revisar dos aspectos primordiales que continuación explicaré:

  • La estructura salarial de su compañía, no debe tener diferencias significativas en las escalas salariales. Realice un análisis del talento humano teniendo presente las siguientes características: Estudios realizados, antigüedad, años de experiencia, posición en la organización (niveles), proyección de carrera y experticia, e incluya elementos particulares a considerar según la industria y la compañía.

Aunque, la nómina es confidencial, todos conocen cuánto gana el vecino y tener diferencias genera sentimientos de insatisfacción que pueden frustrar el crecimiento o la buena labor de un colaborador, es por esto que es importante tener una estructura que no presente diferencias notorias.

  • El crear una compensación variable es una muy buena alternativa, siempre y cuando se tengan los objetivos e indicadores de gestión de la compañía definidos y se tenga claridad sobre la contribución de cada empleado en el momento crítico del mes, trimestre y del año. Adicionalmente, el logro de resultados afianza los intereses comunes y motiva el crecimiento.

 

  1. Autonomía.

A medida que los trabajadores van adquiriendo experiencia y conocimiento de la compañía, del cargo y de los procesos, es importante entregar autonomía para la toma de decisiones. El poder tomar decisiones es uno de los elementos más importantes en la motivación, además de ser un factor vital para el desarrollo personal y profesional.

La autonomía bien dirigida, con una comunicación fluida y con riesgos controlados, permite crecer y desarrollar las carreras profesionales de los colaboradores dando un sentido de responsabilidad en el manejo de los recursos humanos, físicos, económicos y tecnológicos.

Desarrolle el potencial de su talento humano permitiéndoles participar en proyectos especiales, empoderar a las personas en proyectos que representen un reto no solamente sube la autoestima, sino que los prepara para asumir retos más importantes en el futuro.

Al conseguir un punto de madurez, el siguiente paso corresponde a designar la responsabilidad de tener a otros bajo su liderazgo, desarrollando las habilidades de supervisión y en especial la capacidad de potenciar el talento de otros en el logro de resultados.

 

  1. Propósito.

El elemento más importante de desarrollo y motivación en un colaborador es encontrar el propósito de su labor, sin importar el nivel donde se encuentre dentro de la organización.

Al igual que para el médico su propósito es salvar vidas o para el abogado es lograr justicia, es importante hacer notar y resaltar la cada una de las ocupaciones dentro de la organización o dentro de la empresa.

Esto lo puede hacer a través de reforzar el significado de la contribución de cada uno de los colaboradores. Genere una cultura de reconocimiento, donde todos sean escuchados atentamente y sus opiniones sean tenidas en cuenta, por último, resalte la importancia de los trabajos desarrollados y reconozca a la persona. Esto los hace verdaderos líderes.

La aplicación de estos tres principios en su organización hará que el talento humano desarrolle el sentido de pertenencia y la orientación al logro de resultados.

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